Marruecos es un país que ha sufrido un alto crecimiento en los últimos 10 años, impulsado por el desarrollo industrial y sectores como el turismo. Por desgracia, al igual que ha ocurrido en otros muchos países, este crecimiento deja atrás a las comunidades más vulnerables.

Más del 60% de las personas en edad de trabajar, no tiene ninguna formación

En el caso de Marruecos, tanto mujeres como jóvenes, son los más afectados. Así, por ejemplo, los jóvenes acuden desde las zonas rurales, con falta de formación y esto termina siendo una ‘condena para ellos’, perpetuando su situación de pobreza a lo largo de los años.

Ohbay Mechkour, #unahistoriaquecontar

Este es el caso de Ohbay Mechkour, un joven de 18 años del barrio Chifae. Éste es un barrio periférico de Tánger donde la falta de oportunidades para acceder a formación, ha afectado a la gran mayoría de los jóvenes.

La formación tiene unos altos costes inalcanzables para los jóvenes de este barrio y además, las formaciones tienen tiempos de duración demasiado largos. Todo esto provoca que estos jóvenes no puedan acceder a un trabajo y si lo hacen, que sea en unas condiciones laborales muy precarias.

Sin embargo, para Ohbay y muchos otros jóvenes esto está cambiando. El acceso a una formación profesional de una duración corta (3-5 meses), orientada a sectores con demanda, les permite llegar a conseguir un trabajo, que no solo se convierte en la oportunidad que ellos mismos necesitaban, también en una oportunidad que llegará a conseguir un impacto positivo en sus familias y en su barrio.

Los cambios que se están produciendo son reales, son formaciones que cambian el presente y futuro de los más vulnerables.

Ohbay Mechkour: “Antes no trabajaba, pasaba el día durmiendo. Mis padres estaban enfadados. Ahora tengo un oficio que me ha permitido tener un trabajo. Mi familia está contenta y en el barrio me respetan. Ahora también tengo un buen sueldo y puedo ayudar a mi familia y mis hermanos”.

Estos cursos no son solo aprender una profesión, también les enseñamos a construir su propio futuro, habilidades que aumentarán su confianza y que además de llegar a mejorar sus condiciones de vida, también tengan un impacto en su autoestima.

Puedes conocer el proyecto del cual Ohbay Mechkour forma parte, en el vídeo: La formación, un futuro para los jóvenes más vulnerables.

La AECID financia el proyecto que desarrollamos en Marruecos dentro del Convenio “Mejora de la inserción sociolaboral de jóvenes y mujeres vulnerables mediante el fortalecimiento de los programas públicos de formación profesional en Marruecos”.