Declarado por la ONU, es la primera vez en la historia que un año está dedicado a este sector.

Esta celebración internacional implica el reconocimiento del cooperativismo como un factor indispensable para mejorar la calidad de vida de los pueblos y dotar de una mayor eficiencia a la economía de las naciones.

CODESPA tiene varios proyectos en los que apoya la creación de cooperativas para que las comunidades pobres puedan mejorar su situación.

Por ejemplo, en la ciudad de Taourirt, Región Oriental de Marruecos, CODESPA ha apoyado la constitución formal de una cooperativa de costura de mujeres. Esta cooperativa se encuentra  entre las primeras que se constituyen de manera formal en esta capital de provincia. El sector elegido por estas mujeres, el de la costura tradicional, cumple con criterios importantes de viabilidad en el mercado. Por un lado, la demanda de prendas de vestir tradicionales (de mujeres sobre todo), se caracteriza por ser dinámica y estable a lo largo del año según las costumbres locales (ceremonias, bodas, celebraciones religiosas, etc.). Por otro lado, la oferta actual presenta ciertas deficiencias a mejorar en cuanto a calidad y disponibilidad: además de ser frecuentes los desplazamientos de los consumidores a otros centros urbanos mayores para la compra de una prenda de buena calidad, no es raro que las costureras ejerzan su actividad de producción en el ámbito doméstico y sin conocimientos de innovación en el diseño, técnicas de comercialización y marketing, etc.

Esta forma de organizarse les permitirá compartir las sus conocimientos y experiencias, además de acceder al mercado en unas mejores condiciones. Así, estas mujeres vulnerables, podrán desarrollar su negocio y tener unos ingresos que permitan que sus familias y comunidades puedan desarrollarse.

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